El término solsticio de verano proviene del latín y significa "el sol se detiene" y se trata del momento en que el Sol alcanza su punto más alto con respecto al Ecuador. Esto ocurre -en el hemisferio norte- alrededor del 21 de junio,
el día más largo y la noche más corta del año. Asimismo, este fenómeno
astronómico está también vinculado a una gran cantidad de ritos paganos.
Fotografía: Flor de Hipérico, ButterflyCapasia. |
HIPÉRICO, St. John's Wort
Se acerca la mágica noche de San Juan y con ello el maravilloso Hipérico alcanza sus máximas propiedades.
Se cree que el nombre Hypericum tiene su origen en la textura transparente de las glándulas de sus hojas porque viene de la suma de las palabras griegas, hyper = sobre y ericos = imagen. Existen numerosas leyendas relacionadas con esta planta, también conocida como Hierba de San Juan. De acuerdo con una de ellas, brota desde la sangre de Juan Bautista. Según otro mito, la planta nació de la sangre que Jesús perdía en la cruz. Pero, principalmente, debe su nombre al hecho de que los Caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén, cuyo patrón es Juan Bautista, aplicaban la planta en las heridas en la época de las Cruzadas.
Se
cree que el diablo, furioso por sus extraordinarios poderes curativos,
atacó la planta con una aguja y la perforó miles de veces. La leyenda se
basa en el hecho de que al llevar las hojas del hipérico hacia la luz,
se ven, justamente, como pinchazos esas manchas negras que son las
numerosas glándulas aceitosas que poseen.
El
jugo rojo que se obtiene de las flores, se interpretó por las tribus
germánicas, como la sangre del dios del sol, Baldur, quien se
sacrificaba todos los años, para el solsticio de verano.
El
hipérico, es una de las plantas mágicas del solsticio de verano y un
gran amante del sol. Se cree que alcanza sus máximas propiedades
curativas durante la fiesta de San Juan, el 24 de junio, precisamente,
tres días después de esa noche de verano, cuando está en el apogeo de su
floración y disfruta del máximo poder del sol veraniego. Desde épocas
inmemorables se ha honrado este día de unión entre la luz y la tierra,
entre espíritu y materia, con grandes fiestas. Aún hoy, donde se celebra
esta tradición, puede verse la Hierba de San Juan avivando el fuego de
las hogueras en la noche del solsticio de verano.
El
aceite se obtiene mediante la maceración de estas flores en una botella
con aceite de oliva, dejandola a sol y sereno unos 40 días, y después
de este tiempo se pasa por el colador. Conviene distribuir el aceite en
pequeños frascos de cristal opaco, y poder disponer así en distintas
ocasiones, ya que una vez abierto el frasco, su efectividad va
disminuyendo. El efecto del aceite dura unos dos años.
La
hierba se encuentra con facilidad en los margenes de los caminos y allí
donde la tierra ha sido removida. Hay que cortar las flores, sin dañar
la planta, un mediodía soleado alrededor del día de san Juan.
Para
preparar un litro de aceite sólo se necesitan un par de puñados de
sumidades floridas, pero si se le ponen tres o cuatro, mejor.
Se debe ir con cuidado y no recoger estas flores en tierras que hayan sido tratadas con herbicidas.
Preparación del Aceite
Componentes del hipérico
- Ácidos: ascórbico, palmítico y esteárico.
- Aceites esenciales.
- Minerales.
- Hipericina.
- Hiperforina.
- Quercetina.
- Rutina.
- Limoneno.
- Flavonoides.
- Taninos.
Aplicaciones
La utilidad tradicional del Hipérico en estas tierras es en forma de aceite,
y se aplica a fin de minimizar las consecuencias de los golpes, pero es
también muy útil en otras circunstancias. El hipérico tiene propiedades
muy diversas: por un lado es antiinflamatorio, antiséptico. Tiene una
acción antiviral, para el virus herpes, la varicela…cicatriza, estimula
la circulación de la sangre y elimina los hematomas.
Desde
que, hace ya unos cuantos siglos, se le sacó el extracto y sus
componenetes activos se disolvieron en aceite, ha sido muy utilizado y
sigue siendo, mucho más eficaz que cualquier otro producto sofisticado
de laboratorio. Es muy efectivo para curar las heridas y los golpes,
tanto de personas como de animales.
Las llagas en las piernas y las úlceras de las personas mayores, consecuencia de estar largas horas sin moverse, son otras aplicaciones de este aceite. A los niños pequeños también se les hacen friegas en la tripa con aceite de hipérico para tranquilizarlos y calmar los dolores abdominales. También ha sido ampliamente utilizado en cosmética, para cuando la piel está apagada, este aceite la estimula y la regenera.
Las llagas en las piernas y las úlceras de las personas mayores, consecuencia de estar largas horas sin moverse, son otras aplicaciones de este aceite. A los niños pequeños también se les hacen friegas en la tripa con aceite de hipérico para tranquilizarlos y calmar los dolores abdominales. También ha sido ampliamente utilizado en cosmética, para cuando la piel está apagada, este aceite la estimula y la regenera.
Del hipérico se dice que es árnica de los nervios. Las palabres que hieren, duelen más que las lanzas,
dice un proverbio chino. Así que, de la misma forma que sirve para los
golpes físicos, también es beneficioso para los psíquicos, y da una
fortaleza que permite sobreponerse a los momentos difíciles.
La infusión de Hipérico
Fotografía: http://saludablenaturaleza.blogspot.com.esFUENTES
DR. MIQUEL MASGRAU BARTIS, http://www.masgrau.net/
EN BUENAS MANOS http://www.enbuenasmanos.com/